En el corazón de Medellín, la Plaza Botero es un símbolo del arte y la cultura, hogar de 23 majestuosas esculturas donadas por el maestro Fernando Botero. Estas obras, de gran valor artístico e histórico, han sido testigos del paso del tiempo y de la interacción constante con los habitantes y visitantes de la ciudad. Para garantizar su preservación y esplendor, la Fundación Ferrocarril de Antioquia, en alianza con la Secretaría de Cultura Ciudadana, ha emprendido un cuidadoso proceso de mantenimiento y restauración.
El proyecto busca no solo limpiar y restaurar las esculturas, sino también aplicar tratamientos especializados que las protejan de la contaminación, la humedad y otros factores ambientales que afectan su apariencia y durabilidad. Este trabajo meticuloso requiere el uso de técnicas avanzadas de restauración, asegurando que cada intervención respete la esencia y autenticidad de las piezas.
La Fundación Ferrocarril de Antioquia ha estado comprometida con la conservación del patrimonio cultural y artístico de Medellín por más de 38 años. A través de iniciativas como esta, reafirmamos nuestro propósito de salvaguardar la riqueza histórica de nuestra ciudad y garantizar que futuras generaciones puedan seguir disfrutando de estos tesoros.
Además del proceso técnico, esta intervención también representa una invitación a la ciudadanía a valorar, respetar y cuidar estos espacios de encuentro e identidad cultural. La Plaza Botero no solo es un punto de referencia turística, sino un símbolo de la memoria artística que nos define como ciudad.
Gracias a esta labor conjunta entre la Fundación y la administración municipal, Medellín continúa consolidándose como un referente de conservación del arte público, promoviendo la cultura y el orgullo por nuestro legado.
